El Expocómic, o expofriqui para los amigos y conocidos tiene bastante que ver con este blog y con sus orígenes, así que veo justo dedicarle un pequeño homenaje.
Flashback a muchos años atrás, cuando era joven, atlético y apuesto… ey, ¡qué lo sigo siendo! Por entonces no había ni blogs ni cosas de esas y toda la fauna internetera nos concentrábamos alrededor de Dreamers y sobre todo del cómic a gritos, que aunque lleve un tiempo de capa caida, a principios de siglo era lo más de lo más. Allí se concentraban todos los que eran alguien (quizá exagere un poquito) e incluso varios de los gritos se utilizaron como prueba en el juicio contra DR. Bien, pues allí estaba yo, de lurker, que era el termino que se utilizaba antes para aquel que miraba y no escribia, y es que yo siempre que he llegado a un sitio nuevo he tenido la costumbre de mirar durante un tiempo antes de escribir y el CaG intimidaba un poco. Pero llego el Expocómic del año 2000, el del fastuoso y enorme pabellón de cristal, en el que me lo pase estupendamente y es uno de los que más grato recuerdo guardo, pero entonces… entonces yo tenía ganas de criticar ciertas cosas que allí habían pasado. Y me dirigí al CaG, me puse un nick acorde a mi condición de lurker, Observador y lance un largo grito criticando más que alabando y metiéndome con algunas personas de la organización. Al final termine discutiendo con el traductor del evento, con el que me metí de una manera algo personal a pesar de que no le conocía de nada, algo de lo que me arrepentí años más tarde cuando me entere que no había cobrado por su trabajo, ya sabéis, las cosas que pasaban en los Expocómic hace tiempo…
De esta manera me fui poco a poco introduciendo en los foros y forjandome un nombre de leyenda en ellos (MENTIRA GORDA, PERO NO ESTROPEEMOS LA NARRACION). Varios años más tarde, cuando Pons (al que le voy a gastar el nombre estos días) había empezado a poner de moda el tema de los blogs y me pico el gusanillo de hacer uno, no me quedo otro remedio que inaugurarlo con el Expocómic de aquel año, que fue uno de los más nefastos que recuerdo. Encima se acumularon una cantidad de errores en los tebeos tal que veía que tenía material para monton de tiempo y que me iba a poner las botas a criticar. Pero por entonces todavía no tenía las tablas suficientes y se me fue mucha fuerza por el teclado, fuerza que logre reunir meses más tarde para hacer de esto algo regular. Así que se puede decir que el Expocómic me ha dado siempre un pequeño empujón cuando lo necesitaba y que por su culpa me he metido en todos estos berenjenales. Pero que queréis que os diga, es mi Expocómic y yo lo quiero así, con sus defectos y sus virtudes. Esta noche colgare unas páginas sobre como algunos dibujantes han plasmado esta relación de amor-odio que tengo con el evento.
Y como los aniversarios prácticamente coinciden con las fechas del evento, pues casi como que van de la mano uno del otro en este blog. Así que aprovecho para hablar del de este año, al que le iba a dedicar un post en solitario, pero que me deprimía cada vez que veía que ya era el numero 11 y que me estaba volviendo algo viejo ya para estas cosas. Pero ha llegado el momento y lo primero es felicitar a Kenny Ruiz por el estupendo cartel que ha realizado, sobre todo porque ¡ha logrado integrar al madroño en la historia! ¡Es el sidekick del oso! ¡BRILLANTE! En serio, es uno de los carteles que más me ha gustado de todos estos años. Y encima este año repiten la actividad de la visita guiada, y la hace el mismo Kenny, estupendo. Esperemos que al menos sus groupies nos dejen algo de espacio para poder escuchar sus explicaciones (lo de las groupies es verídico, preguntarle cuando le veáis).
En cuanto al resto de actividades, pues lo del Santo me tiene un poco descolocado, pero bueno, entiendo la importancia de los patrocinios cruzados para atraer a más público. Al menos el resto de actividades parece que son lo suficiente interesantes para perder un rato con ellas. El año pasado los organizadores lograron un gran nivel (siempre dentro de las limitaciones del recinto) y esperemos que este año al menos esten a la misma altura.
Por supuesto, como siempre allí estaré, que ya me lo han preguntado varios, e intentare acudir al menos los cuatro días. Si alguien quisiera saludar o tener una grata conversación sobre la muerte conjunta de Bendis y Didio o cualquier otra cosa, que pregunte por los malvados adlateres que por algún sitio estarán, sobre todo rondando el stand de Dolmen, que en los últimos años parece su casa (¡vendidos!). Yo voy con muy buen animo y tengo bastantes ganas de pasar cuatro días relajados allí, que este año ha sido algo durillo el tema blogosférico, y verte cara a cara con los conocidos de todos estos años es muy agradable. Así que ya sabéis, allí nos vemos todos, y cuidado con criticarlo si no eres un centralista mesetario de pro.